Éstos son los personajes más importantes

El blog les gusta a...

Capítulo 52


-       ¿Embarazada? ¿Mer…? – preguntó Tom, confuso.
-       Shhh – le calló su gemelo poniéndole una mano encima de la boca, antes de que se le escapara el nombre de su novia.
-       ¡Ay, va! Lo siento – dijo tapándose él la boca -. Pero vamos, no creo que esté embarazada… ¿no, liebe?
-       Mery ¿qué…? – preguntó June al ver escribir a su amiga, divertida, otro mensaje.
-       Ya te lo enseño, déjame que se lo mande. A ver qué cara pone – rió, maliciosa.
Asimismo, Tom recibió otro mensaje de de Mery y lo abrió con celeridad para poder leer su respuesta, ansioso. Pero no supo en un momento cómo reaccionar a la respuesta que le había dado ella.
“Tn malo sria tnr 1a novia mbarazada, e)-(? vamos, q to eso dl amor incondicional y etrno nos + q 1a patraña! y si si stuviera mbarazada q? m djarias y saldrias corriendo?”
El pobre chico se quedó helado al leer la respuesta. No sabía por qué. Si porque Mery parecía estar que trinaba con él o porque al parecer sí que estaba embarazada. En parte estaba completamente asustado y por otro lado le hacía muchísima ilusión tener un hijo. Sobre todo si era con Mery, la mujer de la que estaba enamorado.
-       No me malinterpretes, liebe – rogó el chico -. Entiende que me ha tomado por sorpresa… no me habías dicho nada.
En aquel momento volvió a recibir un mensaje. Confuso, vio que también era de Mery. Abrió el mensaje sin entender cómo había conseguido contestar casi antes de que hubiera terminado de hablar. Era como si ella ya tuviera preparado el mensaje de antes, que así era aunque él no lo supiera.
El público estaba en ascuas, temeroso de que de verdad pudiese llegar a estar embarazada la novia del famosísimo mujeriego Tom Kaulitz. Pablo y los demás del plató estaban pletóricos, ya que teniendo ese pequeño lapsus de incertidumbre la audiencia estaba creciendo y cada vez más fans y periodistas debían estar viendo el programa, a la zaga de alguna noticia bomba.
“No t preocups, tonto xD. no stoi mbarazada, pro tq igual, amor. siento abrt dado se susto, pro sq no e podio rsistirm. no sabs la kra q as puesto kndo as leido es sms xP! no t enogs, plis. Te amo. Mery”
Tom leyó entre divertido y tierno el mensaje, en gran parte aliviado de que lo del embarazo no fuese verdad. Le encantaría tener un hijo con Mery, pero recién se estaban conociendo y todavía no se sentía preparado para tener uno.
-       Yo también, schön. Es la primera vez que me lo dices – respondió él al “Te amo” que le había escrito ella -. Luego nos vemos en casa.
-       ¡Qué mal rato le has hecho pasar al pobre! – rió Dasha -. Y… por cierto… ¿a qué le ha contestado “yo también”?
-       Le he dicho que lo amo – se sonrojó ella.
-       ¡Tierna! – se enternecieron sus dos amigas y le dieron un abrazo de oso.
-       Y él te ha respondido básicamente lo mismo – sonrió Eric, contento de ver alegre a la que para él era como otra prima, igual que June.
-       Síííí – dijo June, emocionada -, él también es un tierno.
-       Todos son tiernos – corrigió Dasha y se giró a Eric y Derek -, vosotros también – y les guiñó un ojo, haciendo que Derek riera y Eric se sonrojara.
-       ¿Y entonces Tom? – oyeron que preguntaba el presentador del Hormiguero -. ¿Está embarazada tu novia?
-       No – dijo y después de que todas las chicas y los periodistas contuvieran la respiración -. Yo, con lo de “algo serio”, me refería a irnos a vivir juntos o así…
-       Bueno, chicas – se dirigió Pablo hacia ellas -, si ya está haciendo planes para un futuro… me parece que poca cosa podéis hacer.
-       Desde luego – rió Bill mirando a las personas que estaban en las gradas delante de ellos y vio cómo las chicas tenían muecas de pena en la cara.
-       Chicos, estamos llegando al final de la entrevista y queremos hacer unos experimentos con vosotros – comentó el presentador, olvidando ya el tema de los amoríos y levantándose de la silla haciendo que los demás le siguieran.
-       ¿Con nosotros? – Bill intentó disimular que aquella frase lo había asustado.
-       Tranquilo, no te vamos a tocar un pelo – rió Pablo -, pero va a venir Flipa y nos va a enseñar a cocinar algo típico de aquí.
Y entonces la entrevista volvió a tomar un camino divertido. Todos pudieron ver la cara de susto que ponía Bill cuando Pablo decía que allí todo se cocinaba con hidrógeno líquido. Miraba asustado aquella humeante vaharada de hidrógeno que salía del recipiente, pero no por eso dejó de atreverse a meter una galleta dentro y darle un mordisco de prueba. June no pudo evitar volver a ponerse celosa y los demás a reír a carcajada limpia cuando Bill dijo que por el frío ya no sentía la lengua y que Pablo preguntaba al público a ver si alguien quería hacer que la sintiera de nuevo y muchas chicas se ofrecieron voluntarias.
-       Le voy a cortar la cabeza a ese enano canoso – amenazó June -. Me parece que no ha entendido que tiene novia.
-       ¿Novia, Nené? – rió su primo -. Que yo sepa todavía no le has dicho que sí.
-       Es más – añadió Derek, risueño -. Dijiste, y yo lo repito sin temor a equivocarme, que no lo aceptarías hasta que salieras del hospital, es decir, dentro de poco más de seis días.
-       Pues cuando vuelva de la entrevista voy a ser yo la que se lo proponga – respondió ella, enfurruñada, cruzándose de brazos como una niña pequeña -, para que le quede bien claro que ya no está libre.
-       Tonta, Nené – le dijo Mery mientras le acariciaba el pelo -, eso él ya lo sabe.
-       Pero por si las moscas… - una sonrisa juguetona apareció en sus labios, provocando más risas entre sus amigos.  
-       Y para terminar por hoy y con los chicos probaremos un efecto mariposa creado por nuestro inventor… - anunció el presentador -… Marros.
El grupo que estaba en el hospital vio, con cierta pena para ser sinceros, el final de la entrevista y el efecto mariposa fallido. June rió al ver a Bill dar pasos largos y apresurados para salir del plató, como si estuviese deseando de salir de allí a todo correr y meterse en algún otro lugar.
Tom lo siguió de cerca y los otros dos fueron por detrás con más tranquilidad. Cuando los cuatro chicos hubieron desaparecido de la pantalla, Eric volvió a coger en mando de la pequeña televisión, pero esta vez en vez de encenderla, la apagó.
Era tarde, pero Bill todavía no había vuelto para no dejar sola a June y ésta no quería que sus amigos se fuesen hasta que por le menos él volviera. Consiguieron convencer a la enfermera de turno que los dejara estar un ratito más, hasta que el cantante viniese para acompañar a la paciente.
La chica hasta esos días no había notado la suerte que tenía la tener tanta gente que se preocupara por ella y la quería. No había sabido valorarlo hasta que había estado “sola” en el hospital y tenían que decidir quién se quedaba con ella. Por supuesto que Bill estaba siempre cerca suyo, pero él también necesitaba pasear de vez en cuando y estirar un poco las piernas. En esos momentos en los que Bill se iba y sus amigos discutían sobre quién se quedaba con ella, se daba cuenta de lo importante que era ella para ellos y viceversa.
No podía imaginarse lo que sería estar solo, pero absoluta y completamente solo. Sin nadie a quien le importara cómo estaba ni si los médicos estaban haciendo un buen trabajo y le estaban curando. No podía imaginar lo que sería no tener a nadie alrededor que le hiciese compañía aunque ella no estuviese prestando atención a su conversación y los mirara atentamente desde lejos.
No podía imaginarse lo que habría sido no tener a una persona que le quisiera tanto, que al entrar al cabo de poco más de medio día sin haberla visto, sonriese de forma tan amplia y contenta al verla. Que se le iluminasen los ojos al sentirla cerca entre sus brazos al abrazarle. Que deslizara sus manos sobre su pelo y su espalda para hacerle sentir que estaba allí con ella. Que le hiciese sonreír como una boba como estaba haciendo en ese mismo momento Bill con ella.
No podía imaginarse cómo podría haber sido la vida sin él y los demás, y así se lo dijo.
-       No sé qué haría sin ti – susurró June, acariciando con sus labios la mejilla del chico suavemente, haciendo que se sonrojara. Y entonces se giró hacia los demás que los miraban con una sonrisa enorme -. No sé qué haría sin todos vosotros chicos, gracias – añadió con lágrimas en los ojos que intentó eliminar.
-       ¿Me parece a mí o todo el romanticismo de esta tarde te ha trastornado? – rió Derek mientras se acercaba y le daba un beso en la coronilla -. Descansa, tonta, y piensa en qué habríamos hecho nosotros si tú hubieses muerto en aquel accidente.
-       Eso, primita – asintió Eric mientras agarraba su abrigo y se lo ponía -. Tú siempre estás pensando en los demás y en lo importantes que somos todos para ti. Piensas tanto en ello que no te das cuenta de lo importante que eres tú para nosotros.
-       Tierna – rieron Dasha y Mery mientras se ponían sus abrigos y se dirigían hacia la puerta.
-       Deja de preocuparte por nosotros y ocúpate de pasar un rato a gusto con Bill antes de dormirte – Dasha le sonrió desde la puerta antes de salir -. Nos vemos mañana, como siempre.
-       Dile lo que tenías planeado – rió Mery siguiendo a Dasha.
-       ¡Mery! – se quejó June mientras se sonrojaba y veía que Bill la miraba con curiosidad.
-       Así me aseguro de que no te escaqueas y se lo dices – le lanzó un beso desde la puerta -. Te quiero, nena, pero alguien a quien quiero de forma diferente me espera en casa. Adiós.
-       Ciao, chicas – se despidió June de ellas mientras sus amigas se iban.
-       Adiós Nené – Derek ya se había acercado a la puerta.
-       Hasta mañana, pequeña – Eric le dio un pequeño abrazo.
-       Os quiero aquí a la misma hora de siempre – les amenazó June con la mano.
-       Te lo prometemos – rieron los dos a la vez y desaparecieron por la puerta.
-       Por fin nos quedamos solos, liebe – comentó Bill, contento, mientras besaba el cuello de June por el borde del camisón.
-       Sí – suspiró ella.
-       ¿Qué es lo que tenías que decirme? – le preguntó con curiosidad alejándose de ella.
-       ¡Te mataría, Mery! – se quejó ella en broma mientras se tapaba la cara con vergüenza -. Es que me da corte decírtelo.
-       ¡Oh, venga, porfa! – se quejó el chico poniendo cara de cachorrito -. Dímelo, anda.
-       Vale, vale. No me pongas morritos – aceptó ella, besándole los labios.
-       Pero si te encanta – rió él mientras la abrazaba fuertemente.
-       Ya – aceptó -. Verás es que hoy, viendo la entrevista, me he dado cuenta de la casualidad con la que nos conocimos y lo frágil que es en ese sentido nuestra relación.
-       ¿Frágil? – se extrañó el chico -. Un poco más fuerte y me ahogo de lo que me atrae hacia ti.
-       Bueno, esa no es la cuestión – se sonrojó la chica -. Quiero decir que tal y como me conociste a mí podrías haber conocido a cualquier otra. Y yo como una tonta diciendo que no aceptaría ser tu novia hasta que saliera del hospital.
-       ¿Insinúas que…? – Bill la miró emocionado.
-       No insinúo nada – le cortó ella cogiéndole la cara entre las manos –. Ésta vez te lo pregunto yo: ¿quieres ser mi novio?
Al principio el chico no dijo nada y eso hizo que el corazón de June dudara. ¿Había tardado demasiado en pedírselo?
Pero todas sus preguntas se fueron cuando vio que el chico sonreía con ternura y alegría mientras le agarraba las mejillas con las manos con suavidad y le alzaba la cara para que le mirase a los ojos, ya que ella la había bajado de lo nerviosa que estaba. Acarició con infinita ternura sus suaves mofletes.
-       ¿Sabes? – susurró a un centímetro de sus labios -. Aunque hubiese atropellado a otra chica las cosas no habrían sido iguales. No me habría enamorado de ella porque mi corazón estaba destinado a pertenecerte a ti. Estoy seguro que si no hubiese sido de la forma en que lo hicimos, nos habríamos conocido de cualquier otra forma – estaba haciendo que los ojos de June se inundaran de lágrimas.
-       Cállate y bésame, tonto – pidió ella.
-       A sus órdenes, princesa – y apoyó con infinita ternura y pasión sus labios sobre los de la chica.
Un beso al principio tierno que se fue volviendo cada vez más urgente y apasionado. Con el que se decían todo sin necesidad de palabras.
Lo besó hasta sentir que le faltaba el aire y se separó de sus labios para esconder su cara contra su clavícula.
-       ¿Eso es un sí? – preguntó adormilada.
-       Eso es un por supuesto, niña tonta e insegura – rió Bill mientras le acariciaba el pelo con un ritmo tranquilizador con una mano y con la otra le rodeaba las caderas y lo apretaba contra su pecho tan plano como curvilíneo el de ella.
-       Duerme conmigo hoy – le pidió la chica, somnolienta y dando un bostezo.
-       Deja que primero me ponga el pijama.
June lo soltó durante cinco minutos en los que él tardó en coger su pijama, meterse en el baño, cambiarse a toda prisa y volver junto a ella a la cama para tumbarse al lado suyo. Rodeó su pequeño cuerpo con los brazos y la apretó contra él, protegiéndola con su cuerpo ante el frío.
-       ¿Estás segura de que puedo estar tumbado aquí al lado tuyo? – preguntó el cantante con los labios contra su pelo -. ¿Lo dejarán los médicos?
-       Que se jodan si no está permitido – bostezó ella -. Tú hoy duermes aquí conmigo porque sí y punto.
-       ¿Porque sí? – rió él, sintiendo también la bruma del sueño -. ¿No será porque me quieres?
-       Sin duda – respondió ella antes de caer dormida entre sus brazos.
-       Lo sé – fue lo último que dijo Bill antes de dejarse atrapar por los brazos de Morfeo.
***
Pasó el resto de la semana, en la que Bill y June cada vez se quería más y la última empezaba a impacientarse de estar metida en aquella habitación sin poder salir. Las cosas estaban marchando de maravilla y pronto saldría de allí.
El día en el que por fin salía de aquel hospital al que June últimamente denominaba prisión…

3 comentarios:

  1. bien!, no, bien no, lo siguiente, ha estado GENIAL!!!
    y encima ha sido largo!! :D
    que guay!, estoy emocionada, que bonito cuando june se lo pide y él sonrie..... y en el programa, dios, por un momento pensé que estaría embarazada mery :)
    hehehe, cuidate mucho
    un beso!!

    ResponderEliminar
  2. Me gusta mucho tu fic , SIGUELA ! la mia es http://deamornadimuere.blogspot.com/ se pasan ?

    ResponderEliminar

Gracias por comentar. Lo creáis o no,
motiva mucho y se agradece ver que tu
esfuerzo es valorado por alguien.

Aparecerán todos los comentarios que
se hagan exceptuando en los que
aparezcan groserías dirigidas hacia mí